viernes, 7 de junio de 2013

NACIONAL

El POT VIVE HORAS CRUCIALES EN MEDIO DE ALTA TENSION

Gremios pidieron retirar proyecto, constructores protestaron y Concejo se dividió para votarlo o no.

En medio de un ambiente político altamente caldeado y rodeado de intereses de toda índole, el proyecto de revisión del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) del alcalde Gustavo Petro surte este viernes una de sus etapas más cruciales.
Quince concejales, que integran la comisión del plan, decidirán si extienden el debate por los 90 días que otorga la ley, o votan hoy para definir si lo aprueban en primer debate o lo niegan, como propone la ponencia del concejal liberal Miguel Uribe Turbay.
Aunque desde el 2 de mayo, cuando fue radicado en el Concejo, se han escuchado diversas voces en contra del proyecto, este jueves fue uno de los días más adversos: los gremios en bloque le pidieron a la Administración que lo retirara, mientras representantes de diversas empresas de la construcción salieron a la calle a marchar en contra del POT.
“La propuesta es que se tome el tiempo y el espacio necesarios para hacer los estudios técnicos requeridos y formular entre todos el POT que beneficie a los bogotanos y asegure el desarrollo sostenible de la ciudad”, dijo el Comité Intergremial en rueda de prensa. (Lea aquí: Al POT le llueven críticas desde todos los sectores)
El temor de quienes no apoyan el proyecto es que, si no se vota hoy viernes, la iniciativa quedaría archivada y eso el Alcalde lo interpretaría como que “el Concejo no se pronunció” y lo expediría por decreto, según Miguel Uribe, quien recordó que el reglamento del Concejo ordena dar primer debate antes de que terminen las sesiones ordinarias.
Sus compañeros de ponencia, Diana Rodríguez y Diego García Bejarano, advirtieron que la ley está por encima del reglamento del Concejo y ella da 90 días para discutir el POT.
Al final de la tarde, la veedora distrital, Adriana Córdoba, insistió en que el debate debe ampliarse e instó a las bancadas a actuar en bloque frente al futuro del plan y otros proyectos, como valorización y cupo de endeudamiento.
Por su parte, el concejal Orlando Parada, integrante de la comisión, dijo que el POT merece una discusión amplia. “Si el Alcalde convoca a sesiones extras, debemos darnos la oportunidad de mirar qué trae de bueno o de malo la propuesta; es un tema de ciudad que no podemos despachar en una tarde”.
‘Quiero que se discuta’: Petro
Dice que prefiere no expedir el POT por decreto
El alcalde Gustavo Petro aseguró que, si se cierra la discusión, “se niega la propuesta de nueve mil ciudadanos que participaron y que tienen otras maneras de ver la ciudad”.
“El cierre de la discusión será la perversión de la democracia y me lleva a tomar por decreto una decisión que no quiero tomar por decreto”, dijo Petro al referirse al escenario de que hoy quede cancelada la posibilidad de seguir discutiendo la reforma del POT en el Concejo.
“Quiero que se discuta, que se concierte, porque este es un tema complejo; nadie puede hablar por los demás; hay que hacer que todos puedan expresarse sobre las dudas que tengan sobre el Plan de Ordenamiento Territorial, punto por punto”, afirmó el mandatario.
Lo que contiene la norma
El POT es un conjunto de normas de larga duración que va más allá del periodo de los gobiernos, y define qué se puede y qué no se puede hacer en él y con el suelo de la ciudad.
De lo que el POT permita o no dependen la calidad de vida, la convivencia y la economía. Regula, entre otros temas, hacia dónde crecer, zonas que se deben proteger, relación de la ciudad con municipios vecinos, usos del suelo por sector, dónde y cómo deben ser sus vías, el transporte público, parques, servicios públicos, colegios, hospitales y proyectos más importantes.
El que está vigente se expidió en el año 2000 y se reformó en el 2003. El alcalde Gustavo Petro propuso hacerle una revisión excepcional. El eje de la propuesta es desestimular el desarrollo del borde y la periferia e impulsar el repoblamiento del centro con más edificación (pisos), apalancándose en la inversión privada para construir vivienda de interés prioritario.
Entre otras cosas, propone la mezcla de usos del suelo en toda la ciudad y permitirles a los empresarios más edificabilidad (pisos) a cambio de ceder suelo para espacio público y VIP, llevar el uso residencial a zonas de comercio intensivo, especialmente el centro, y eliminar más de 1.400 normas para simplificar los trámites.
Un asunto clave, y de los más polémicos, es el que propone la clasificación de comercio y servicios restringidos, que serían los que presentan una o varias características que obligan a los responsables a tomar medidas para no afectar el entorno, relacionadas con la invasión del espacio público, el ruido, seguridad y orden público.
‘El POT no eleva el valor de la vivienda’
El Distrito negó que el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT) encarezca el valor de la vivienda, como han dicho algunos constructores y el Ministerio de Vivienda. “Están haciendo mal las cuentas”, dijo Planeación.
El Ministerio de Vivienda ha dicho que el costo se podría elevar en 50 por ciento a consecuencia de las cargas que el Distrito les quiere imponer a los dueños del suelo en la ciudad.
El Distrito precisó que en el nuevo POT se permitirá altura libre en la zona del centro ampliado.
Eso significa la posibilidad para los dueños del suelo y para los constructores de edificar más pisos en la misma área de terreno y, en consecuencia, tener proyectos más rentables, según las posibilidades y tamaños de sus predios.
Lo que el POT establece es que, a cambio de esa mayor rentabilidad que lograrán por la libre edificabilidad, los propietarios del suelo le aporten a la ciudad parte de esas mayores utilidades que obtendrán, a través de suelo para espacio público, vías e infraestructura urbana. Son cargas urbanísticas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario